martes, 21 de diciembre de 2010

Eclipsis

Puse el despertador a las 4.00 A.M, me desperté sonambuleado, caminé el pasillo todavía desconocido en el tambalear de mis pies, agarré de pasada una botella de agua, el atado de luckys y salí a la terraza, me senté al lado del potus, prendí un cigarrillo y estiré el cogote para ver el eclipse, cuantas sensaciones produce una sombra, en principio pensé que dios estaba jugando a las sombras chinescas, pero después me dije, Esteban, vos no crees en dios, pensé luego en que sólo eran sombras, y más o menos me cerró la idea, después pensé en las civilizaciones primitivas, en pink floyd, en mí, en lo que estaba soñando porque estaba medio dormido ( lo que estaba soñando me lo guardo para mí, porque dicen que los sueños nunca se cuentan, porque es lo único que sólo es nuestro) y seguí pensando, me fuí para el lado físicuantistico de la situación ecplipsiana, uno sabe que la tierra se interpone entre el sol y la luna, o sea que la tierra funciona como separador de éstos dos astros, actúa de entrometida, fisgona y tía gorda solterona de baile de barrio, claro que me cerró esta idea, defendí a los dos astros y por suerte duró un instante y eso me puso contento, me fuí a dormir tranquilo, tiembla Stephen Hawkins, hasta el año que viene sombra corta mambo.

No hay comentarios: